Llevar audífonos puede mejorar considerablemente la calidad de vida una vez detectada una pérdida auditiva. Si bien es cierto, hace falta un pequeño periodo de adaptación para acostumbrarse a ellos…

Los primeros días de toma de contacto son clave para determinar la satisfacción, por eso desde nuestro centro auditivo en Sevilla proponemos algunos consejos para acostumbrarse a los audífonos de  la mejor manera posible. Si logras llevar a cabo estas recomendaciones, podrás disfrutar de los audífonos por muchos años…

Llevar audífonos no es un capricho, acostumbrarse a ellos será clave para conseguir una mejor audición y calidad de vida 

Consejos rápidos para acostumbrarse a los audífonos

1. No te desanimes a la primera de cambio

Al igual que tu nariz necesita acostumbrarse a la sensación de las gafas, tus oídos también necesitan tiempo para adaptarse y acostumbrarse a los audífonos. Es posible que sientas incomodidad durante los primeros días, pero ten paciencia porque esa sensación desaparecerá en poco tiempo.

2. Al principio no los uses durante todo el día

Para acostumbrarse a los audífonos es importante que al principio los utilices solo en situaciones y entornos cómodos. Cuantos más sonidos puedas reconocer y filtrar, así como identificar como molestos, más ayudarás a tu audioprotesista a hacer los ajustes pertinentes. Además, cuanto más uses tus audífonos, incluso en situaciones tranquilas, más sonidos podrás detectar y filtrar, de modo que cuando estés en un entorno ruidoso, tu cerebro habrá podido aclimatarse más rápido.

3. Comienza en una estancia tranquila

El primer día, siéntate en una habitación tranquila de tu casa y comienza a acostumbrarte a tu capacidad redescubierta de escuchar sonidos débiles, como el tictac de un reloj o un automóvil que pasa afuera. Estos sonidos pueden parecer anormalmente altos al principio porque tu cerebro no está acostumbrado a escucharlos. Todo es parte del ajuste y no durará mucho. Como profesionales de salud auditiva te animamos a anotar las cosas que notas que pueden molestarle. Antes de regresar a tu próxima visita de seguimiento, mira tu lista y tacha los sonidos que ya no son molestos. Si encuentras que algunos todavía lo son, deberás informar para que éstos se ajusten en tu visita de seguimiento.

4. No juegues demasiado con el volumen

Es probable que tus audífonos se ajusten automáticamente a diferentes situaciones auditivas, por lo que no debería ser necesario ajustarlos manualmente con mucha frecuencia. Si los subes, no subas demasiado el volumen. No intentes que tus dispositivos hagan lo que tus oídos en pleno funcionamiento no podrían hacer, como por ejemplo escuchar sonidos débiles desde muy lejos; los audífonos no funcionan de esa manera, y si los manejas así podrán dañar más tu audición.

5. Practica hablando con personas en grupos

Comienza a tener conversaciones con tus amigos cercanos y familiares, ya que las voces familiares son las más fáciles de identificar. Escuchar con audífonos requiere de una escucha activa , lo que significa asegurarse de estar frente a la persona que habla y mirarla directamente mientras habla. Esto ayudará a tu cerebro a volver a conectar los puntos entre los sonidos, los patrones vocales y el lenguaje corporal no verbal.

6. Lee en voz alta para ti mismo

El sonido de tu propia voz podrá parecerte divertido al principio, pero esto también se resolverá después de unos días. Para acostumbrarse a los audífonos lee para ti mismo en voz alta, de esta manera conseguirás acostumbrarte a tu voz más rápido. Si es necesario, practica hasta que consigas hablar en un volumen adecuado.

7. Cierra los ojos y haz algunos ejercicios de escucha

Para acostumbrarse a los audífonos trata de identificar la dirección de donde provienen los sonidos sin mirar a tu alrededor. También puedes intentar usar solo tu audición para discernir entre diferentes tipos de sonidos o patrones de habla.

8. Ve películas con subtítulos

Escuchar y leer palabras al mismo tiempo es una excelente manera de acostumbrarse a los audífonos. Esto ayuda a entrenar tu cerebro a conectar los sonidos y el lenguaje. Activa los subtítulos de tu televisor y habilita los subtítulos cuando veas una película.

9. Pide a tus amigos o familiares que ajusten el volumen de la televisión a un volumen «normal»

Ahora que tienes nuevos audífonos, no deberías necesitar subir el volumen de la televisión más de lo que lo haría una persona con audición normal. Pide a otra persona que te ayude a encontrar un volumen apropiado y trata de usar esa configuración de manera constante.

10. Ve utilizándolos gradualmente hasta que los uses todo el día

Después de aproximadamente dos semanas, deberías de usar tus audífonos durante todo el tiempo (excepto mientras te duchas, por supuesto). Esta consistencia es importante para que tu cerebro se ajuste a la amplificación. Así conseguirás asegurar que tus dispositivos ayuden a tu audición tanto como sea posible.