Mitos sobre los audífonos que frenan a tratar la pérdida de audición
La pérdida auditiva no tratada puede aumentar el riesgo de problemas de salud mental y física y conduce a mayores tasas de hospitalización.
La pérdida auditiva no tratada se asocia con un mayor riesgo de depresión, demencia, ataque cardíaco y caídas.
Las personas tienden a esperar un promedio de diez años desde el momento en que comienzan a notar pérdida auditiva hasta el momento en que buscan ayuda. Durante ese tiempo, la comunicación con los seres queridos se vuelve más difícil, y el aislamiento y los riesgos para la salud aumentan. Esto en gran medida se debe a los mitos sobre los audífonos, que no ayudan nada a querer tratar esta enfermedad.
Mitos sobre los audífonos que frenan a tratar la pérdida de audición:
Es importante señalar que el uso de audífonos mejora la calidad de vida de todos aquellos que los necesitan. Los audífonos ayudan a que las personas con pérdida de audición se sientan mejor y sean capaces de retomar relaciones personales. Además, ayudan a evitar otras posibles enfermedades.
Si crees que tu audición ha disminuido, vale la pena que cojas cita con un audiólogo de confianza para que te realice un examen de audición. ¡No permitas que los siguientes mitos te impidan obtener ayuda!
«Usar audífonos significa que soy viejo y no estoy preparado para eso»
Es normal sentirse preocupado, porque la pérdida auditiva en muchas ocasiones se relaciona a la vejez. También es normal intentar ocultarlo. Muchas personas con discapacidad auditiva quieren llevarlo en silencio en lugar de participar en conversaciones y actividades porque temen que los problemas de audición les haga parecer impotentes o menos competentes. La verdad: conectarse con otros puede ayudar a que tu cerebro se mantenga más joven y te mantenga involucrado con la vida.
«Los audífonos no quedan bien»
Otro de los mitos sobre los audífonos es que son feos y no quedan bien. Olvídate de los audífonos antiguos con auriculares grandes y silbantes. Los audífonos y los implantes cocleares actuales son más pequeños (y menos llamativos) que nunca. Incluso algunas celebridades (como por ejemplo el ex presidente Bill Clinton) los usan con orgullo.
«Los audífonos son difíciles de usar»
Hay un período de interrupción a medida que tu sistema auditivo central y tu cerebro, se adaptan a la vida con audífonos. Es por eso que la mayoría de médicos y centros auditivos incluyen un período de prueba, para que puedas estar seguro/a de que el tipo que has elegido, ya sea un modelo en miniatura detrás de la oreja o uno que se ajuste a su oído, es el adecuado.
«Los audífonos cuestan demasiado dinero»
En la actualidad, la seguridad social no cubre el coste de los audífonos, lo que lleva a tener que pagar por ellos. Sin embargo, ten en cuenta el alto coste de la pérdida auditiva, que además de dificultar el día a día puede derivar en otros problemas de salud. Sin duda invertir en salud siempre es un acierto.
«No necesito un audífono si tengo una pérdida auditiva leve»
La pérdida auditiva y las necesidades auditivas de cada persona son diferentes. Hay a personas con pérdidas auditivas leves que el uso de audífonos les va bien y les mejora la calidad de vida. Un audiólogo puede ayudarte a descubrir lo que necesitas.
«Mi audición empeorará porque mis oídos dependerán de los audífonos»
Este es uno de los mitos sobre los audífonos que más preocupa a los usuarios. Tu audición no empeorará con el uso de audífonos que se ajusten adecuadamente. Los audífonos proporcionan a tus oídos un sonido que de otro modo no escucharían. Sin un audífono, tus oídos no recibirán los sonidos que solían recibir y tu cerebro «olvidará» cómo eran estos sonidos. Es importante estimular tu audición y ésta no empeorará con el uso de un audífono que se ajuste adecuadamente.
Y tú, ¿conoces más mitos sobre los audífonos? Cuéntanoslo en comentarios y ayuda a personas con pérdida de audición a poner solución.