La otitis se trata de un problema muy común que se agrava en este tiempo estival por la excesiva entrada de agua en los oídos por el mayor uso de piscinas y viajes a la playa.   Para entender como y porque surge la otitis debemos conocer a grandes rasgo la estructura de nuestro oído. La parte más externa (oído externo) está compuesto por la oreja y el conducto auditivo externo justo hasta el tímpano. Como esta parte esta bastante encerrada por la piel es más difícil de limpiar y es más vulnerable a las entrada de agua y agente externos.

Como detectarlo

Es esta parte donde normalmente se detecta la mayoría de las otitis. Podemos detectar que padecemos una otitis, por los siguientes síntomas.

• Picor excesivo en el oído.
• Sensación de que se tiene algo en el oído.
• Supuración del oído.
• Pérdida de audición debido a la inflamación.

Como prevenirlo

Como siempre se ha dicho, mejor prevenir y curar y para prevenir la otitis los pasos a seguir son muy sencillos. Debemos evitar el que se produzca tapones regularmente visitando cuando detectemos uno a nuestro otorrinolaringólogo de confianza. Debemos tener los oídos lo más secos posibles, y sobre todo después del baño limpiar y secar a conciencia nuestros oídos, siempre evitando los bastoncillos ya que suelen provocar más daños que beneficios. Con una simple toalla podemos secar perfectamente nuestro oído externo. Particularmente en piscinas que tienen exceso de cloro, suele afectar negativamente a nuestros oídos, ya que alteran la piel y el cerumen protector que hace que aumente las posibilidades de contraer una otitis.   En definitiva, podremos disfrutar del verano manteniendo una limpieza y secado correcto de nuestros oídos. Aunque si detectamos que contraemos una otitis con bastante frecuencia, siempre podremos acudir a nuestros tapones de oídos que podemos encargarlos a medida.